Filipinas
2007
98 minutos
Drama.
Para mayores.
Sinopsis: Brillante Mendoza cuenta la historia de una familia que ha tenido a un niño en acogida. Rodada en los barrios bajos de Manila, muchas veces en tiempo real y en sólo cinco días, la película se acerca al cinema vérité. Thelma, su esposo Dado y dos hijos adolescentes viven en un barrio pobre de Manila. A pesar de no tener demasiados recursos económicos, la familia se siente afortunada por tener una casa. Además, forman parte de un programa de acogida de niños abandonados a los que tienen en su casa hasta que se formaliza el proceso de adopción definitivo. Ahora se disponen a entregar al pequeño Jhon-Jhon, de tres años, a un matrimonio rico estadounidense. Mendoza muestra a través de su cámara inquieta el día a día de un pueblo que dispone de muy poco para vivir. No da por sentado ningún detalle; por el contrario se detiene para mostrar las miserias de unos personajes que los domingos van a la iglesia para rogar a Dios que los saque de esa horrible situación. (FILMAFFINITY)
Valoración cinéfila 8/10
Valoración adopción 10
Esta película parece a veces un documental, por lo realista y bien ambientada que está. Trata sobre un día en una familia de acogida. El día de entrega de su "hijo", en adopción, a una familia estadounidense.
Aunque son pobres, son familias adecuadas para poder acoger niño huérfanos, que si no tendrían que estar en orfanatos. Se ve como están bien asesoradas, realizan el libro de vida del niño, con fotos y textos...
Pero el drama viene cuando tienen que separarse del niño al que han acogido durante tanto tiempo, en este caso tres años.¿Quién y cómo les han preparado para esa pérdida?
Es una excelente película para ponerse en el lugar de los padres acogedores transitorios. Y ver su difícil e importantísima misión. Y por otro lado se ve lo importante de lo que se da en esa familia, que son vínculos, amor, cuidados...aunque no tengan ni agua corriente, ni apenas medios.
Es otra manera de ver la adopción internacional, desde el punto de vista de los apegos y vínculos que el niño deja atrás, de su cultura, su ambiente, su estilo de vida... cuando se va de su país.
Da una imagen bastante positiva de la adopción y el acogimiento en Filipinas.
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