EEUU
1942
81 min
Drama
Sinopsis: Una pareja pierde la posibilidad de tener un hijo al tener la mujer un accidente de guerra. Son periodistas norteamericanos, que cubren la Segunda Guerra Mundial en Inglaterra. Y mientras ella decide volver a los EEUU a recuperarse tras su operación, él se queda a cubrir noticias en un Londres bombardeado y descubre a un niño que se ha quedado huérfano y luego a todo un orfanato y se va encariñando con dos de ellos a los que protege y decide adoptar, al ver que es una solución en la que todos ganarían: su mujer que añoraba un hijo, los niños, dañados por esta guerra y él cuando comprueba que ya los quiere.
Valoración cinéfila 7/10
Valoración adopción 9/10
Interesante película norteamericana de los años cuarenta, en plena Segunda Guerra Mundial, que intenta reflejar además de los estragos de la guerra, la situacion en la que quedan muchos niños que pierden a toda su familia y que necesitan un hogar, justo además cuando están traumatizados.
La pareja protagonista se encontraban felices, ella embarazada, viniendo de Paris a cubrir las noticias periodísticas de Londres, cuando éste empieza a ser bombardeado y ella pierde su embarazo y queda estéril.
Se vuelve a su país y el marido por azar encuentra un primer niño al que salva de los escombros y queda impresionado por esta realidad del abandono. Luego va a un orfanato a cubrir la realidad de los niños huérfanos y encuentra a una directora con muy buen criterio a la hora de actuar con los niños. Que podría decir con una actitud de "buenos tratos " muy moderna y como si tuviera una intuición de lo que luego sería estudiado como "las teorías del apego."
Allí este hombre encuentra por ejemplo a una niña que grita cada vez que ve a un hombre, por que le recuerda la situación traumática cuando perdió a su familia; encuentra al niño que salvó, pero que no lo reconoce y le lleva un caballito que recuperó de su casa. Y este niño se apega a él desesperadamente como figura paternal. Así como otra niña que viene de un hogar de acogida y que le han pegado por llorar, con lo que viene sin atreverse a echar una lágrima. Y en una escena maravillosa la directora consigue que llore, acogiéndola y entendiéndola. Este hombre ayuda como puede y cuando acompaña a los dos niños que le quieren, a ser adoptados o acogidos por una nueva familia, estos no quieren ni soltarle y solo quieren volver. Con lo que a él se le empiezan a activar el vínculo que ya ha hecho con ellos y decide adoptarles y se lo comunica a su mujer. Ésta sufre un shock, pero se recupera rápidamente. Y lo acepta encantada.
Hay un momento de dramatismo en el que tiene que renunciar a llevarse a uno de los niños, por falta de sitio en el vuelo que les llevaría, y a la directora no se le ocurre más que un test de inteligencia para ver a cual se llevan. Esta parte me parece bizarra, pero se resuelve como era de esperar y entiendo que es una licencia del guión para crear intriga. Pero desafortunado.
Durante las escenas que vemos salen muchas situaciones que reflejan los síntomas de trauma por la pérdida que han tenido estos niños y también da un mensaje de que van a tener que tener unos padres amorosos, que no se centren en darles comida o abrigo, sino un tipo de trato que les respete como seres humanos y que les acepten con todas esas dificultades que traen y sobre todo esa inseguridad y ese miedo a volver a ser abandonados.
No hay comentarios:
Publicar un comentario